Durante el período 2021-2025, el Gobierno nacional, a través de Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB), destinó más del 65% de su presupuesto a actividades de exploración con el objetivo de descubrir recursos que permitan reducir la dependencia de importaciones de combustibles, especialmente gasolina. Sin embargo, diversos expertos coinciden en que los resultados son inciertos, ya que Bolivia continúa siendo un importador neto de estos productos.