La activación de una carga explosiva en un tramo del oleoducto Caño Limón-Coveñas, que atraviesa la zona rural del municipio de El Carmen, en Norte de Santander, generó este jueves una emergencia ambiental por el derrame de crudo sobre tres afluentes que alimentan el acueducto rural de cerca de 5.000 habitantes.
Fuente: El Tiempo‎‎‎‎‎‎‎
   
Este nuevo atentado ocurrió en horas de la madrugada, en el corregimiento Guamalito, de esta localidad nortesantandereana. Aunque no se tiene certeza sobre la identidad de los responsables, las primeras versiones indican que la explosión fue perpetrada por miembros de la guerrilla del Eln, que operan en esta zona del departamento.
 
De acuerdo con el alcalde de El Carmen, Edwin Contreras, el mayor vertimiento de petróleo ocurrió en la quebrada Cimitarra, que abastece el acueducto de todo el municipio. Sin embargo, tropas adscritas a la Fuerza Tarea Vulcano del Ejército, que se encuentran desplegadas en la zona, informaron que la mancha de crudo también se extiende en las quebradas La Esperanza y El Carmen, esta última desemboca en el río Magdalena.
 
“Ecopetrol ya se encuentra en el lugar atendiendo la emergencia. Me dijeron que en una hora, aproximadamente, se resolverá la situación. Ya estoy informando sobre el incidente a todas las autoridades del departamento para estudiar la posibilidad de declarar la emergencia en el municipio”, aseguró el mandatario.
 
En lo corrido de 2017 se han presentado más de 28 voladuras contra esta línea de transferencia de crudo. El último evento, que ocurrió el pasado 15 de febrero, obligó a la estatal petrolera a suspender durante más de 45 días el bombeo en los 328,3 kilómetros de tubo.
 
Debido a estos ataques contra la infraestructura petrolera del país, ocurridos el año pasado, el vertimiento del hidrocarburo impactó 81.987 metros cuadrados de capa vegetal en los departamentos de Boyacá, Norte de Santander y Arauca.