Para obtener una respuesta a esta pregunta, es importante aclarar que en Uruguay el Poder Ejecutivo fija el precio de venta al público (PVP) máximo para la distribución secundaria (margen de estacioneros) pero no impide que una estación o un grupo (por ejemplo, de un sello) decida ofrecer descuentos bajando los productos en el surtidor a costo de su propia rentabilidad a modo de fidelizar clientes, como ocurre en Brasil.