Fuente: El Espectador
Según esa cartera, “la decisión de la calificadora refleja la confianza en que el Gobierno del presidente Iván Duque Márquez adelantará las reformas que contribuirán a la consolidación fiscal y mantendrá el sólido manejo macroeconómico del país”.
“La perspectiva estable refleja la expectativa de un fortalecimiento gradual de los perfiles fiscal y externo del país, y la expectativa de que la administración del presidente Duque impulsará con éxito políticas necesarias para alcanzar un crecimiento económico más sólido”, señaló el viceministro general de Hacienda, Andrés Pardo Amézquita.
Los congresistas serán convocados la próxima semana para empezar el debate en las plenarias de Senado y Cámara de la ley de financiamiento. Esta, por medio de una reforma tributaria, busca recaudar cerca de $7 billones de más de $14 billones que se calculan que hacen falta en el Presupuesto General de la Nación aprobado para el próximo año.
"Con la Ley de Financiamiento y con los ingresos adicionales generados por los mayores precios del petróleo, se podrá continuar con el proceso de estabilización de los niveles de deuda pública”, añadió el viceministro.
En un comunicado, la cartera de Hacienda informó que “S&P espera una mejora progresiva en indicadores claves como la deuda externa neta y el déficit de la cuenta corriente”.
No obstante, horas antes de que se conociera el concepto de S&P, Mario Castro, analista de Nomura Holdings en Nueva York, le dijo a Bloomberg News que "una baja de la calificación (de Colombia) podría tener lugar dentro de los próximos dos años". Añadió: "Los ingresos fiscales no son suficientes para cumplir con los compromisos fiscales".
Según dijo a ese medio de comunicación el jefe de investigación del Banco de Bogotá, Camilo Pérez, el proyecto de ley se encarga del déficit de ingresos de Colombia en 2019, pero no disipa la amenaza de rebaja en la calificación crediticia.