También se le pidó a 17 generadoras realizar gestiones urgentes para asegurar el abastecimiento de diésel, mientras se mantenga la indisponibilidad de alguno de ambos circuitos de la línea Nueva Pan de Azúcar-Polpaico.
En octubre del año pasado se aseguraba que la Argentina no iba a requerir más el gas de Bolivia y que la importación de la última molécula desde el norte daba lugar a una nueva era en la cual el gas de Vaca Muerta podría atender todas las necesidades de las siete provincias de esa región. Sin embargo el pico de demande invernal que se empieza a hacer sentir y las obras inconclusas de reversión del Gasoducto del Norte obligaron a recalcular.
Es una obra clave para exportar petróleo no convencional que conecta Añelo con Allen. La nueva infraestructura tiene una extensión de 130 kilómetros y podrá transportar hasta 472.000 barriles diarios.
Se necesitan 60 millones de dólares semanales para importar diésel y gasolina y, según expertos, además de gestionar nuevos créditos, el Gobierno debe reducir el gasto; con el alza del petróleo, las compras se vuelven más caras.
El operativo logístico avanza con el desembarco en la Terminal Marítima Sica Sica, mientras otros cinco buques aguardan condiciones favorables para descargar más de 100 millones de litros de combustibles.
Hasta agosto, la Entidad Ejecutora de Conversión a Gas Natural Vehicular (EEC-GNV), prevé la entrega de al menos 14.500 cilindros de distintas capacidades (desde 40 a 100 litros), para el transporte público de forma gratuita y con costo para el sector privado. La entrega se inició en mayo.