Las compañías petroleras que operan en Brasil, incluidas Petrobras y ExxonMobil, presentaron una demanda ante el Consejo Regulador Antimonopolio (CADE) contra la fusión de las empresas proveedoras de servicios de petróleo y gas Subsea7 y Saipem, según informaron dos fuentes con conocimiento directo del asunto.
Documentos sobre la demanda, publicados por el regulador antimonopolio y a los que tuvo acceso Reuters, indican que Petrobras y Exxon plantearon fuertes preocupaciones sobre la competencia en relación con la fusión y solicitaron al CADE que considerara los impactos de la alta concentración que podría generarse en el mercado de servicios submarinos de petróleo y gas.

Las compañías petroleras argumentan que un acuerdo entre la italiana Saipem y la noruega Subsea7 podría generar una concentración excesiva, lo que elevaría los costos y reduciría la competencia en el país, según las fuentes, que hablaron bajo condición de anonimato debido a que trabajan con empresas clientes de las empresas proveedoras de servicios.

Con la fusión, anunciada en julio, las compañías controlarían aproximadamente un tercio del mercado de servicios de la industria del petróleo y gas en alta mar, según las fuentes. El grupo fusionado, que pasará a llamarse Saipem7, tendrá una cartera de pedidos de 43.000 millones de euros e ingresos de aproximadamente 21.000 millones de euros, según informaron previamente las compañías. Se espera que el acuerdo se cierre en el segundo semestre de 2026.

Las petroleras ya han estado lidiando con la concentración de proveedores desde la fusión de Technip y FMC hace unos años.

"No podemos dejar a las petroleras en manos de tres actores... Son empresas altamente especializadas, con buques que cuestan al menos 1.000 millones de dólares cada uno", declaró una de las fuentes. Petrobras declaró en una carta a Cade, al solicitar ser parte en la demanda, que la transacción "tiene fuertes impactos competitivos que afectan a la compañía", ya que esta "depende directamente de la instalación de estructuras rígidas de tuberías y de las respectivas interconexiones entre pozos y unidades de producción para realizar su principal actividad económica".

Copasa (CSMG3) se dispara un 30% en semanas, pero Genial advierte: Posibles inconvenientes Exxon destacó que la transacción genera una alta concentración en el sector de proyectos SURF, con menor competencia, menor oferta de clientes, menor innovación y un posible deterioro de la calidad del servicio.

Technip Brasil solicitó ser incluida en el proceso como parte interesada, señalando que la transacción generará distorsiones en el mercado, con la virtual eliminación de un tercio de los competidores en licitaciones públicas y una importante concentración de buques.

Según Technip, la fusión limitaría significativamente la capacidad de los actores actualmente activos para competir eficazmente en diversas licitaciones. Según las fuentes, el sector ya enfrenta desafíos con precios del petróleo por debajo de los 70 dólares por barril y tensiones geopolíticas, así como el impacto de la guerra arancelaria iniciada durante la administración de Donald Trump, que ha disparado el precio de los insumos y servicios.

"Esta fusión sería la tormenta perfecta para un sector que ya lidia con presiones complejas", afirmó una de las fuentes. "Sería una nueva concentración de un sector que recientemente vio la fusión entre FMC y Technip", añadió, señalando que, dependiendo del proyecto, los costos para las petroleras podrían representar alrededor del 40% del valor total, y la concentración del mercado podría inviabilizar las operaciones.

La industria solicita al Cade que bloquee la fusión o imponga medidas para preservar la competencia, como la venta de activos o la creación de una nueva empresa, según las fuentes. "O bien el Cade veta la transacción o impone soluciones, como la obligación de ceder buques o crear un nuevo modelo de negocio", declaró.

El CADE no proporcionó más información que la publicada en la demanda. Petrobras, Exxon, Technip e IBP tampoco hicieron comentarios de inmediato. Saipem y Subsea7 también declinaron hacer comentarios.

Fuente: Money Times