El petróleo subió el viernes, registrando también su segunda semana consecutiva de ganancias gracias a la disminución de las tensiones comerciales entre Estados Unidos y China, aunque los precios se vieron frenados por las expectativas de un mayor suministro de Irán y la OPEP+.
Los futuros del crudo Brent cerraron con un alza del 1,4%, a 65,41 dólares por barril, mientras que los futuros del crudo West Texas Intermediate de EE. UU. subieron un 1,4%, a 62,49 dólares.

Los contratos de referencia registraron ganancias semanales del 1% y el 2,4%, respectivamente. Los contratos cayeron más del 2% en la sesión anterior ante la perspectiva de un acuerdo nuclear con Irán que podría resultar en una flexibilización de las sanciones, lo que podría permitir el regreso del petróleo iraní al mercado global.

“Los esperados aumentos de la producción de petróleo de la OPEP+, junto con un acuerdo nuclear con Irán más probable, han resurgido (expectativas bajistas)”, declaró Dennis Kissler, vicepresidente sénior de operaciones de BOK Financial. “A corto plazo, a medida que la situación geopolítica se modere, se necesitará una fuerte demanda de viajes estacionales en los próximos meses para compensar los aumentos previstos de la oferta”, añadió Kissler. El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, declaró el jueves que Estados Unidos se estaba acercando a un acuerdo nuclear con Irán, y que Teherán estaba prácticamente de acuerdo con sus términos. Sin embargo, una fuente familiarizada con las negociaciones afirmó que aún quedaban asuntos por resolver.

Los analistas de ING escribieron en una nota que un acuerdo nuclear que levantara las sanciones permitiría a Irán aumentar la producción de petróleo, lo que se traduciría en un suministro adicional de unos 400.000 barriles diarios.

Fuente: Agencia