El presidente de la junta directiva de PDVSA, Pedro Tellechea, y su equipo han estado recuperando de manera progresiva la producción de petróleo y combustible. Los acuerdos con estas empresas energéticas europeas representan un impulso significativo para lograr que las cifras den un salto importante. Las multinacionales Eni y Repsol han abierto una puerta de esperanza para los habitantes de las provincias venezolanas, los cuales han sufrido las consecuencias de la merma en la producción de gasolina.
La relación entre PDVSA, Eni y Repsol no se limita solo al suministro de componentes para la refinación de petróleo. También incluye la explotación de gas en el Proyecto Cardón IV, que cuenta con una reserva de 15 billones de pies cúbicos. Este potencial gasífero es de suma importancia para Venezuela, ya que el país busca convertirse en un proveedor de gas para Europa y mantener operativa su industria de generación de energía eléctrica.
Las alianzas entre PDVSA, Eni y Repsol se remontan a la década de 1990, pero las relaciones han tenido altibajos debido a los conflictos del gobierno de Nicolás Maduro con la comunidad internacional. Las sanciones impuestas por la Oficina para el Control de Activos Extranjeros de Estados Unidos (OFAC) han limitado la capacidad de la estatal petrolera. Sin embargo, la flexibilización de algunas sanciones y la normalización de algunas relaciones han creado un clima propicio para retomar la cooperación.
Fuente: ZBR