El 27 de abril debe realizarse la asamblea general ordinaria de la empresa estatal. En el evento, se espera que Petrobras elija el nuevo directorio, con ocho nombres por elegir en ese momento, dos de los cuales probablemente serán elegidos por accionistas minoritarios y seis por el gobierno.
El gobierno envió más de 10 nombres para análisis, cuatro de los cuales fueron rechazados por el Comité de Personal de la empresa: Pietro Mendes, Sergio Rezende, Efraín Cruz y Renato Galuppo.

Según Bloomberg, que escuchó de fuentes familiarizadas con el asunto, el gobierno brasileño planea continuar con la designación de nombres que no fueron aprobados en las auditorías internas de Petrobras para componer el directorio del estado.

BBI recuerda que el gobierno ha insistido en nombres que no fueron aprobados por el comité. Así que el nuevo gobierno podría hacer lo mismo y seguir el ejemplo.

¿Qué pasa después de eso? Una vez que se haya decidido el nuevo directorio, el gobierno puede cerrar de inmediato la nueva política de dividendos de Petrobras, refuerza el BBI.

Según la corredora, si la empresa realmente se preocupa por su valor de mercado, debe establecer un flujo de dividendos robusto y predecible, capaz de soportar cambios en la asignación de capital y fluctuaciones del petróleo.

“La pregunta que hemos recibido de los inversionistas recientemente es: a qué nivel de payout creen que las acciones de Petrobras reaccionarían positivamente (suponiendo que se aprueben los dividendos para el cuarto trimestre de 2022)”, plantean los analistas Vicente Falanga y Gustavo Sadka, en informe publicado la semana pasada.

Para ello, el equipo de análisis toma como ejemplo a Vale (VALE3). Se espera que la empresa de materias primas del sector privado pague, teniendo en cuenta la recompra de acciones, un rendimiento del 14% en 2023.

“Como empresa estatal, Petrobras no debería pagar mucho menos”, enfatizan Falanga y Sadka. "Creemos que cualquier política anunciada con un pago de hasta el 50% de los ingresos netos no provocaría demasiada reacción en las acciones".

Según BBI, un payout del 50% se traduciría en un pago de US$ 12 mil millones, considerando resultados de US$ 24 mil millones para este año y US$ 90/barril de petróleo Brent, lo que representaría un rendimiento de 16%, muy cerca de Vale. “Cualquier cosa por encima de eso podría resultar en una apreciación bastante fuerte”.

Según BBI, si Petrobras quiere terminar el primer trimestre de 2023 con niveles de caja similares al cuarto trimestre del año pasado, podría pagar hasta US$ 7 mil millones en dividendos en el mejor de los escenarios.

“El ingreso neto estaría más cerca de $ 6-6.5 mil millones. Por lo tanto, nuestro caso base es entre US$ 3-4 mil millones declarados. Cuanto más, mejor”, completan los analistas.

La recomendación es "neutral", con precio objetivo de BRL 26 para las acciones de la petrolera. Petrobras publica su balance el 11 de mayo.

Fuente: Money Times