Fitch Ratings ha publicado el informe especial “Lo que los inversores quieren saber: Evolución del sector del gas natural en Brasil”. El documento detalla la visión de la agencia sobre los principales aspectos relacionados con la expansión del sector, así como los riesgos y oportunidades para las distribuidoras y transportadoras de gas dentro del actual diseño regulatorio.
Según Gustavo Mueller, director de Finanzas Corporativas de Fitch y uno de los autores del informe, la apertura del mercado del gas a nuevos proveedores debería favorecer la migración de algunos grandes consumidores a la condición de clientes libres. Al mismo tiempo, el director señala que la medida exigirá eficiencia a las distribuidoras en la compra de gas para mitigar los impactos en la caja.

Para Fitch, algunos de los principales cuellos de botella del sector siguen siendo el acceso a la infraestructura de procesamiento y el flujo de gas a nuevos proveedores. También existe la necesidad de desarrollar nuevas estructuras de drenaje, lo que requiere importantes inversiones. La agencia también destaca el fuerte perfil financiero de las empresas evaluadas.

Según el documento, las estimaciones apuntan a una reducción de 20% a 30% en los ingresos de los contratos de transporte de gas cuando se renueven. Este escenario es manejable para los operadores calificados por Fitch, dados sus perfiles financieros. NTS tiene contratos que vencen de 2025 a 2030 y TAG de 2025 a 2033. Durante la vigencia de estos contratos, existe una garantía de ingreso del 100% de su capacidad de transporte, que es contratada por Petrobras.

Con el fin de los contratos y la posible entrada de nuevos proveedores de gas en la cadena, los transportistas deberán optimizar el uso de las capacidades de transporte y es posible que no estén 100% contratados como lo están hoy. La expectativa es que los nuevos contratos incluyan cláusulas más flexibles, lo que mitigaría cualquier capacidad de transporte ociosa.

El principal impacto de la inflación sobre las distribuidoras debería provenir indirectamente de la reducción del volumen facturado, debido al aumento de las tarifas a los consumidores finales. El precio del gas ya es alto debido a la subida de los precios del petróleo, lo que puede reducir la competitividad del insumo frente a otras fuentes de energía.

El informe de la agencia dice que escenarios macroeconómicos más recesivos pueden impactar el desempeño de las distribuidoras, con una reducción en la generación de caja, ya que, en general, presentan una exposición de demanda relevante al sector industrial, debido a la concentración del volumen facturado en este segmento. Comgas es el más diversificado en consumidores residenciales y comerciales, los cuales tienen mayor rentabilidad que el segmento industrial, lo que lo protege de escenarios adversos y fortalece el modelo de negocios.

La demanda de los transportistas no está expuesta hasta el vencimiento de los contratos vigentes, ya que el 100% de las capacidades están contratadas. Los transportistas y distribuidores cuentan con cláusulas de reajuste tarifario y margen de contribución, respectivamente, ligadas a la inflación, lo que les protege en un entorno inflacionario. A su vez, el escenario actual de altas tasas de interés perjudica el flujo de caja de las empresas debido al aumento en los desembolsos del servicio de la deuda.

Fuente: Agência CanalEnergia