“Este no es un proceso que se completará en días. Tomará tiempo debido a la cantidad de elementos que deben resolverse”, dijo Sullivan mientras se embarcaba con el presidente Joe Biden hacia el Medio Oriente.

La medida había sido acordada entre los países del G7 durante una cumbre celebrada a finales de junio. El objetivo es evitar que Rusia siga lucrando con la invasión de Ucrania, que ya ha provocado subidas de precios de la energía.

Según el informe publicado por la AIE (Agencia Internacional de la Energía) en junio, incluso con la caída del volumen, los ingresos por exportaciones de petróleo ruso aumentaron.

Fuente: Poder 360