Los bonos de Ecopetrol ya han registrado algunas de las mayores pérdidas entre las petroleras de los mercados emergentes
Las políticas energéticas de América Latina son vulnerables a una mayor influencia política que podría afectar las tendencias crediticias en todo el sector, dados los cambios propuestos por el nuevo presidente de Perú y los posibles cambios de liderazgo tras las elecciones presidenciales de este año en Colombia, donde Gustavo Petro lidera las encuestas.

Así lo advierte Fitch Ratings en un análisis en el cual subraya que “en Colombia, el principal candidato de izquierda en las elecciones de mayo, Gustavo Petro, pide el fin de los nuevos contratos petroleros y una transición de la dependencia de la economía de los combustibles fósiles para girar hacia más fuentes e inversiones de energía renovable”.

Los bonos extranjeros vendidos por Ecopetrol han perdido 7% desde agosto, casi el doble de la caída promedio de la deuda petrolera de mercados emergentes, según Bloomberg.

Por su parte, los rendimientos de los bonos del Gobierno, tanto en moneda local como en moneda fuerte, han subido a sus niveles más altos desde que la pandemia de covid-19 provocó un descenso en los mercados crediticios hace dos años. Los bonos nacionales, conocidos como TES, han perdido un 9,9% en los últimos cuatro meses, el peor desempeño en América Latina, según un índice de Bloomberg. Los bonos en dólares también han caído un 10%.

En Brasil, la política energética se está convirtiendo en una parte clave de la retórica de la campaña antes de las elecciones de octubre, con el expresidente y posible candidato Luiz Inacio Lula da Silva indicando que hará cambios en las políticas de precios de la energía si resulta elegido,

"La incertidumbre en Brasil y Colombia sigue al intento del presidente peruano Pedro Castillo de nacionalizar o monetizar el acuerdo de licencia del Consorcio Camisea, que es un riesgo importante para el perfil de flujo de caja de Hunt Oil Company of Peru", advierte Fitch.

Fuente: La Republica