“El paro cívico intersectorial afecta a la circulación de cisternas que abastecen de combustible a todo el territorio nacional, por lo que existe riesgo de desabastecimiento, particularmente en Santa Cruz”, dice parte del texto.
Asimismo, afirma que alrededor de 350 camiones cargados y detenidos en las zonas pobladas, entre Camiri y Yacuiba, representan un altísimo riesgo de explosión, al estar muchas concentradas sobre la carretera, una al lado de otra.
“La Planta de Separación de Líquidos de Río Grande, al no tener la manera de evacuar el producto, lo acumula en tanques especiales, con lo que la autonomía se reduce al completarse su capacidad de almacenamiento. Por esto se debe encontrar una solución hasta el domingo, que es cuando ésta quedará colmada”, dijo el presidente de YPFB, Wilson Zelaya.
Fuente: Los Tiempos
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