FUENTE: PÁGINA SIETE
El gabinete aprobó ayer un decreto supremo reglamentario que autoriza la mezcla de gasolina con un 12% de etanol como máximo, como aditivo para mejorar el octanaje. “Hace unos días el presidente Morales promulgó la Ley de Aditivos de Origen Vegetal. Se aprobó un decreto que nos autoriza la mezcla del etanol con la gasolina base hasta el 12%, como un aditivo”, informó el ministro de Hidrocarburos, Luis Alberto Sánchez.
De acuerdo con esa norma, Ley 1098, era necesaria la definición mediante decreto del límite de porcentaje de mezcla del aditivo vegetal (etanol anhidro) con las gasolinas base para la elaboración del nuevo combustible Súper Etanol 92. Según el ministro Sánchez el nuevo combustible empezará a ser comercializado desde el 15 de octubre próximo. De acuerdo con el plan de trabajo, la gasolina Súper Etanol 92 se venderá en una primera etapa en La Paz, Cochabamba, Santa Cruz y Tarija, y posteriormente en toda Bolivia”.
La autoridad refirió que inicialmente 100 estaciones de servicio ofrecerán el producto y de forma progresiva hasta fines de año ya tendrán el producto entre 300 a 400 estaciones. “El próximo año llegaremos al 95% de todas las estaciones de servicio del país”, destacó. Aclaró que la Súper Etanol 92 es un combustible alternativo y garantizó la producción y abastecimiento de la gasolina especial. “La población no debe preocuparse, desde el Gobierno garantizamos la gasolina especial, con el precio de 3,74 bolivianos y los volúmenes que demanda Bolivia, así que no debe haber ninguna preocupación en este sentido”, explicó.
El nuevo combustible tendrá un alto octanaje con múltiples beneficios en la generación de empleos y en el cuidado de la naturaleza, ya que se dejará de importar grandes volúmenes de carburantes y aditivos. “Hemos decidido comprar a productores nacionales, a pequeños agropecuarios un producto que va a ser un aditivo amigable al medio ambiente y va generar un fuerte impacto en la economía nacional”, subrayó. Entre los beneficios más importantes del etanol están la disminución de la dependencia del petróleo; es un oxigenante de las gasolinas y mejora el octanaje, lo que ayuda a reducir los gases de efecto invernadero.
El rendimiento del etanol quema mejor y da más poder a los motores; actúa como un anticongelante en los motores, mejorando el arranque en frío; se genera mayores volúmenes de producción, con lo que se garantiza la seguridad alimentaria; incrementa la producción de energía eléctrica alternativa a través de la biomasa. En el primer semestre Bolivia importó combustibles y aditivos de 24 países por 563 millones de dólares.
El gabinete aprobó ayer un decreto supremo reglamentario que autoriza la mezcla de gasolina con un 12% de etanol como máximo, como aditivo para mejorar el octanaje. “Hace unos días el presidente Morales promulgó la Ley de Aditivos de Origen Vegetal. Se aprobó un decreto que nos autoriza la mezcla del etanol con la gasolina base hasta el 12%, como un aditivo”, informó el ministro de Hidrocarburos, Luis Alberto Sánchez.
De acuerdo con esa norma, Ley 1098, era necesaria la definición mediante decreto del límite de porcentaje de mezcla del aditivo vegetal (etanol anhidro) con las gasolinas base para la elaboración del nuevo combustible Súper Etanol 92. Según el ministro Sánchez el nuevo combustible empezará a ser comercializado desde el 15 de octubre próximo. De acuerdo con el plan de trabajo, la gasolina Súper Etanol 92 se venderá en una primera etapa en La Paz, Cochabamba, Santa Cruz y Tarija, y posteriormente en toda Bolivia”.
La autoridad refirió que inicialmente 100 estaciones de servicio ofrecerán el producto y de forma progresiva hasta fines de año ya tendrán el producto entre 300 a 400 estaciones. “El próximo año llegaremos al 95% de todas las estaciones de servicio del país”, destacó. Aclaró que la Súper Etanol 92 es un combustible alternativo y garantizó la producción y abastecimiento de la gasolina especial. “La población no debe preocuparse, desde el Gobierno garantizamos la gasolina especial, con el precio de 3,74 bolivianos y los volúmenes que demanda Bolivia, así que no debe haber ninguna preocupación en este sentido”, explicó.
El nuevo combustible tendrá un alto octanaje con múltiples beneficios en la generación de empleos y en el cuidado de la naturaleza, ya que se dejará de importar grandes volúmenes de carburantes y aditivos. “Hemos decidido comprar a productores nacionales, a pequeños agropecuarios un producto que va a ser un aditivo amigable al medio ambiente y va generar un fuerte impacto en la economía nacional”, subrayó. Entre los beneficios más importantes del etanol están la disminución de la dependencia del petróleo; es un oxigenante de las gasolinas y mejora el octanaje, lo que ayuda a reducir los gases de efecto invernadero.
El rendimiento del etanol quema mejor y da más poder a los motores; actúa como un anticongelante en los motores, mejorando el arranque en frío; se genera mayores volúmenes de producción, con lo que se garantiza la seguridad alimentaria; incrementa la producción de energía eléctrica alternativa a través de la biomasa. En el primer semestre Bolivia importó combustibles y aditivos de 24 países por 563 millones de dólares.