Los cisterneros del oriente boliviano mantenían este jueves su cerco sobre las oficinas de YPFB en Santa Cruz de la Sierra en rechazo a la pretensión de la petrolera estatal de acordar nuevos contratos para la importación de combustibles.
Consideran que estos acuerdos deberían definirse con el nuevo gobierno que asumirá el próximo 8 de noviembre. Plantean que se firme una nueva adenda a los contratos que están vigentes desde el 2024.

Como parte de la protesta, los cisterneros colocaron sus camiones y cerraron el paso vehicular en la doble vía a La Guardia, entre tercer y cuarto anillo.

Fuente: El Día

Lea la noticia