Si bien el viceministro de Minas y Energías, Mauricio Bejarano, reconoció que Paraguay enfrenta un panorama complejo en materia energética, con riesgos de crisis a partir del 2030 si no se implementan soluciones estructurales, en la práctica el Gobierno se está ocupando en encontrar solucionar. “Todas las alternativas para generar energía son importantes”, afirmó.
Explicó que el Gobierno está “ocupado” en encontrar mecanismos que garanticen la continuidad de Paraguay como país con excedente energético, condición clave para el desarrollo y la estabilidad económica. “Celebramos que los gremios empiecen a hablar del tema, pero ahora debemos enfocarnos en el cómo”, sostuvo. Entre las medidas en marcha, el viceministro mencionó la reforma normativa para fomentar energías renovables no hidráulicas, como la solar fotovoltaica, así como un nuevo marco para pequeñas hidroeléctricas.
Asimismo, apuntó a la necesidad de diversificar la matriz energética con gas natural. En ese sentido, destacó el avance en las negociaciones con Argentina para un gasoducto, que permitiría instalar una central térmica en el sur del país. También se estudian proyectos termoeléctricos multifuel para utilizar recursos como el alcohol nacional en caso de escasez de gas.
La autoridad añadió que el sector privado jugará un papel clave en estas inversiones, que podrían generar una rentabilidad atractiva mediante la venta de energía.
Fuente: Hoy