Estas demandas de la agrupación indígena son producto de esas movilizaciones de octubre del 2019 y junio del 2022 y que aseguran los mandatarios incumplieron. Los dos paros anteriores tuvieron como bandera de protesta el precio de los combustibles y hace un año se sentaron en mesas de diálogo en las que se avanzó en el proceso de focalización del subsidio a los combustibles, que era una de sus demandas, pero eso quedó estancado.
Desde el Gobierno se informó que el Ministerio de Obras Públicas y la Agencia de Regulación y Control tienen varias alternativas para la focalización. Pero como los representantes de la Conaie abandonaron las mesas de diálogo “no ha habido interlocutor con quien discutirlas. Por eso el tema focalización sigue suspendido”, se indicó este viernes 20 de octubre en una de las carteras de Estado que formaron parte de la mesa de diálogo sobre la focalización de subsidios a los combustibles.
Este tema fue uno de los más difíciles del proceso de diálogo entre el Gobierno y organizaciones indígenas y hasta octubre del 2022 se avanzó en criterios sobre quiénes deben seguir recibiendo subsidio y quiénes no, pero no en un mecanismo para la focalización. El método seleccionado fue la exclusión de quienes pueden pagar un precio mayor: por ejemplo, según el vehículo y el sueldo, y la inclusión de quienes carecen de recursos y por ello tendrán un precio diferenciado.
Luego de eso, el 6 de abril de 2023 se instaló una mesa técnica para tratar la focalización. Para entonces, el Ministerio de Energía y Minas desarrollaba modelaciones de las propuestas de metodologías de cálculo de precios sin subsidios, y se convocó a otros sectores como los distribuidores de combustible. Las mesas de seguimiento con los indígenas no se retomaron. La metodología del diálogo estableció que debían estar presentes todas las partes, algo que no ocurrió y el Ministerio de Gobierno explicó en junio pasado -al cumplirse un año del paro- el porqué: El 23 de febrero pasado, la Fenocin anunció su retiro de las mesas de seguimiento, aunque mantuvo vigilancia del cumplimiento de los acuerdos. Al día siguiente, la Conaie resolvió también retirarse de los diálogos con el Ejecutivo, alegando que no había existido “voluntad política del Gobierno para el cumplimiento de los acuerdos”.
“Al contrario, el gobierno de Guillermo Lasso ha continuado avanzando en sus políticas neoliberales que violentan nuestros derechos territoriales, comunitarios y la economía nacional”, dijo entonces Leonidas Iza, presidente de la Conaie. Ahora, son 15 los pedidos en los cuales se insisten en temas como la baja de tasas de interés y condonación de deudas y el control de precios, pero se suman otros nuevos como la suspensión de los tratados de libre comercio -este gobierno logró firmar tres acuerdos comerciales con China, Corea del Sur y Costa Rica- y la no explotación petrolera del Yasuní tras la consulta popular realizada en agosto pasado con las elecciones anticipadas.
Fuente: El Universal