Así, durante la celebración de Energyear Colombia 2023 se ha puesto sobre la mesa la necesidad de seguir profundizando en una regulación que homogenice los procesos y licencias, que haya mayor comunicación y conocimiento entre todos los actores de la cadena de consecución de los proyectos y la necesidad urgente del almacenamiento energético como forma de impulsar la energía renovable.
Para hablar de los retos para el inpulso de la energía solar fotovoltaica, se contó con la participación de Daniel García, Commercial Senior Manager de Atlas Renewables; María del Pilar Toro, Country Manager Colombia de Akuo Energy; Héctor Núñez, Colombia, Mexico, C.A & Caribbean Head of Sales de Sungrow; Ana María Serna, Global Key Account Manager de Barlovento y Gracia Candau Sánchez, Country Manager Colombia de Atlántica. Como moderador, actuó Leonardo Cárdenas, Ingeniero Senior de ATA Renewables.
Como ya se adelantó, la homogeneización de las licencias de construcción fue un reto expuesto como necesario para seguir mejorando en el desarrollo de proyectos, ayudando así a las municipalidades y a las empresas. “Consideramos que hay una oportunidad de mejora en la que se podría emitir un decreto con el que facilitar la vida a la municipalidades y a nosotros, donde se le pueda dar una pautas y que sea así un proceso más fácil, porque muchas veces por el desconocimiento de la municipalidad se nos retrasan los procesos”, explicó Toro.
Además, Toro apuntó a que esa falta de homogeneidad en las licencias provocan problemas en el ámbito de la financiación y bancabilidad. “Los bancos hacen debidas diligencias con asesores externos y, si ven licencias de construcción que no son homogéneas porque cada uno hace lo que la municipalidad le pide, se generan retrocesos”, indicó.
Igualmente, Candau señaló que, desde el punto de vista operativo, donde más problemas encuentra son con las licencias de construcción. “Llevamos con una licencia parada desde hace más de cuatro o cinco meses, es un proyecto pequeño con la ventaja competitiva que tiene de ser rápido, pero tenemos unas obligaciones y al final se nos replantea la pregunta de si podemos seguir con ese negocio”, explicaba a modo de ejemplo.
Y es que los problemas en las demoras también son uno de los desafíos pendientes para el desarrollo de los proyectos. “Creo que todos sufrimos retrasos en los trámites y creo que varias de las entidades que tenemos aquí en Colombia no tienen suficiente personal para procesar todos esos trámites que estamos radicando actualmente”, apuntó Toro.
Como apuntaba Candau, todos los procesos llevan una programación y si las demoras se producen, hay un desequilibro en todo lo demás. “La realidad que tenemos es que los proyectos se tienen que concebir y diseñar desde la etapa de desarrollo. Y si las licencias de construcción o de permisos ambientales se demoran, se desequilibran los tiempos y la fecha en la cual tenemos que entrar en operación comercial se nos dificulta mucho, por lo que hace que la planeación sea verdaderamente complicada”, explicó.
Para la Country Manager de Atlántica, la comunicación también es un proceso clave que influye en toda esta problemática: “Un gran problemque tiene potencial de mejora es lac comunicación. Nosotros hemos comprado proyectos en operación comercial en Colombia y ahora estamos reforzando mucho el desarrollo interno, y la comunicación con todos los agentes que están a nuestro alrededor y con nuestro entorno directo es crucial”.
“Desde el principio todos debemos ir con un mismo mensaje, teniendo claro qué son las energías renovables, qué es un parque fotovoltaico, cómo vamos a ayudar en la zona que trabajamos y explicar exactamente qué queremos. Desde nuestro punto de vista, es básico que todo esté muy ordenado, que haya una planificación clara, unos tiempos muy claros y, para eso, necesitamos mucha ayuda de que los trámites vayan rápido y de que se tenga claro el mensaje”, añadió.
Por otro lado, una de las dificultades señalada por la Country Manager de Akuo Energy es el tema de las compensaciones de los proyectos. “Hay proyectos a los que no solo se le pide compensar por los individuos que se aprovechen, sino que también nos van a poner unas cargas en las que prácticamente es compensar una hectárea de proyecto por una hectárea de compensación, La dificultad que estamos teniendo en esto es que es muy difícil conseguir tierras. No es que estemos en contra de la compensación, pero debemos encontrar medidas de ver cómo lo podríamos mitigar, y eso no podría llevar a pensar en nuevas oportunidades”, argumentó Toro.
Resolución 075
Por su parte, García señaló los atractivos con los que cuenta el mercado renovable colombiano para invertir en el país. “Colombia es un mercado atractivo por distintas razones: por su distribución del sector eléctrico y la tecnología de generación, con mucha generación hidroeléctrica y una buena capacidad de embalse donde parte de los obstáculos que puede tener la energía renovable para entrar en un sistema se mitigan. Otra de las características es que tiene las señales de mercado, lo que los asesores dirían los fundamentos de mercado, y lo vemos por cómo está la dinámica de precio o cuáles son los efectos que tienen los cambios climatológicos en el apetito de compra que se ha tenido últimamente por renovables”, desarrolló.
Al ser preguntado por la resolución 075, García reconoce que resolvió un problema que había en ese momento y que fue un paso en la dirección correcta. “Hay muchas opiniones y son muy diversas. Mejoró una situación y resolvió un problema de una capacidad que estaba indisponible para que pudiera crecer el mercado. Con potencial de mejora y pudiendo tener mejores alternativas, sí resolvió un problema, y eso se ve ahora, toda la última asignación de puntos de conexión, que fueron más de 4 GW de asignación, 3.8 de solar concretamente. Fue un paso en la dirección correcta pero siempre se tiene que tener en mente un marco regulatorio dinámico”, defendió.
Precios y regulación de baterías
En otro orden, Núñez habló de los precios del mercado, los cuales considera se han estabilizado y no son una barrera para la consecución de proyectos; así como del necesario desarrollo del almacenamiento energético. “Para nadie es un secreto que los inversores y los sistemas que suministramos forman una parte importante del CAPEX. Tras la pandemia hubo una afectación en los precios importante pero esto, afortunadamente, se ha normalizado a lo largo de este par de años y en lo que hay que trabajar es en la innovación. Esto a nivel de precios se traduce en ser más eficiente y poder suministrar y proveer a los clientes soluciones que tienen un valor mayor y optimizando costos, haciendo que estas soluciones sean cada vez más económicas y entregando más potencia, que es lo que nos piden los clientes. Los precios se han estabilizado y no vemos que sean una barrera en cuanto a que se puedan desarrollar proyectos”, aclaró.
En cuanto al almacenamiento, Núñez destacó la importancia de profundizar en la regulación del país en este ámbito. “El mensaje a nivel de baterías es que nos encantaría que hubiera una regulación que ayude al incentivo y al uso de estas tecnologías porque, actualmente, no hay esos beneficios de pago por servicio complementarios que hay en otros países y que podría ayudar a incentivar a que los utility incorporen estas tecnologías”, apuntó.
A modo de futuro, Núñez planteó el siguiente escenario: “A manera de pronóstico, creo que va a pasar como en Chile, que tienes mucha producción donde no necesariamente está toda la demanda y las líneas de transmisión no se construyen a la velocidad que se van incorporando las plantas fotovoltaicas, con lo cual es posible que empiecen a asistir a futuro unos curtailment o unas limitaciones de inyectores esa. Invito a esos clientes que consideren los síntomas de almacenamiento como una posibilidad de poder tener esa energía que no vas a poder inyectar el día de mañana y sí inyectar en los horarios convenientes”.
Brasil, un espejo en el que mirarse
Finalmente, y haciendo mención a esos escenarios similares en los que fijarse para ver los retos y las enseñanzas que tomar de cara al futuro, Serna habló del desarrollo exponencial que Brasil ha tenido en el mercado solar en los últimos diez años, asegurnado que hay semejanzas con lo que podría llegar en el mercado colombiano. “A pesar de las diferencias en tamaño, nuestro mercado en Colombia se parece en muchas cosas al caso que yo he visto en Brasil. Brasil partió en el 2012 de no tener nada de solar, a tener hoy en día 24 GW sólo de solar fotovoltaica, y estamos hablando de un ejemplo de que las cosas, a pesar de los desafíos, se pueden dar. En ese 2012 el Gobierno promulgó la ley marco de solar y de ahí en adelante viabilizó para que los usuarios se pudieran conectar a la red eléctrica y este es un sector que necesita de ese ambiente y ese marco regulatorio, es una práctica necesaria y repetitiva para que los mercados se desarrollen”, explicó.
Así, apuntó a que mecanismos que se diseñaron en Brasil como los créditos por generación solar o los descuentos de la tarifa de uso del sistema de red para las grandes plantas son buenas prácticas que ponen en evidencia que se requiere ese entorno y ese ambiente regulatorio claro para que las cuestiones se den.
“El crecimiento esperado aquí en Colombia está en la solar fotovoltaica. No hay que dejar de lado los demás tipos de energía, pero la solar es la que nos va a llevar a crecer aquí en Colombia de la misma forma que ha pasado en Brasil”, concluyó.
Fuente: Review Energy