El presidente de la República, Guillermo Lasso, posesionó a Fernando Santos Alvite como nuevo ministro de Energía y Minas, a través del decreto 587. Santos se convierte así en el tercer ministro en esta importante cartera de Estado, que se encarga de los temas hidrocarburíferos, mineros y eléctricos, luego de Juan Carlos Bermeo y Xavier Vera. Este último renunció la semana pasada, luego de verse envuelto en una serie de denuncias de corrupción y en una investigación por cohecho.
En su primera intervención en Carondelet, el ministro Santos agradeció por esta nueva oportunidad de servir al país (en 1987 ya fue ministro), e hizo votos que como en el caso del Quijote la segunda obra sea mejor que la primera. También aseguró que es necesario tener las cuentas claras en la empresa petrolera, que al momento no tiene balances y dijo que buscará mejorar la producción, reconociendo que al momento el petróleo de extracción fácil ya fue aprovechado y ahora es necesario extraer el petróleo difícil. Esto se lo debe hacer con el contingente de la empresa privada, pues la estatal no tiene los recursos necesarios. Se debe llamar a la empresa privada y firmar contratos en condiciones beneficiosas para las partes, de un ganar ganar.
Otro reto importante que ve Santos es mejorar la calidad de los combustibles: “en un país civilizado no se puede vender un combustible mayor a 10 partes por millón, pero en el Ecuador se vende uno de 500 partes por millón”, dijo.
El petróleo en el país está dividido en un 78 % en manos de la industria pública petrolera y un 22 % en manos del sector privado. Es importante señalar que Petroecuador, según la Constitución, debe ser una empresa con autonomía financiera, administrativa y operativa, para que pueda responder a los retos que otorga el país, entendiendo que en este Gobierno ha existido un declive de la producción petrolera.
Petroecuador le da alrededor del 30 % de ingresos al presupuesto general del Estado, por ende, Cáceres expresó que no existe oposición ante la inversión extranjera, misma que debería estar donde existe riesgo.
Fuente: KCH