Medio centenar de empresas líderes en la Argentina difundieron un informe sobre la potencialidad para desarrollar la economía del hidrógeno en el país.
El Consorcio H2AR, integrado por un grupo que reúne a 50 empresas de primer nivel para desarrollar la economía del hidrógeno en la Argentina, dio a conocer un informe en el que destaca las potencialidades para promover a un sector clave en el país.

El documento reseña un conjunto de estudios elaborados durante el 2021 sobre el diagnóstico situacional y las potencialidades para fortalecer la cadena de valor del hidrógeno en la Argentina.

¿Por qué el Hidrógeno? El hidrógeno se proyecta como un vector energético clave en la vinculación de fuentes primarias con los puntos de consumo en un contexto de electrificación y descarbonización global. En ese marco, el sector energético deberá reconfigurar su estructura de la mano de nuevas tecnologías y oportunidades de negocio.

De acuerdo al escenario trazado, la Argentina posee las mejores condiciones para la producción de hidrógeno limpio ya sea a través del hidrógeno verde – se espera que alcance paridad económica en 2030- o hidrógeno Azul (gas natural).

Se estima que la demanda del hidrógeno como insumo industrial aumentará ostensiblemente en la próxima década

Seis conclusiones claves del informe El estudio describe un escenario de optimismo en el sector de cara a las posibilidades de desarrollo de la actividad en base a seis dimensiones:

El país tiene un gran potencial para desarrollar una estrategia de producción dual de hidrógeno limpio. Ya cuenta con costos competitivos para el reformado de gas natural con captura de C02 y se espera que el hidrógeno verde alcance paridad económica en 2030. Los costos proyectados ponen en una excelente posición a la Argentina para atraer inversiones e incorporarse a la cadena de valor global que se está desarrollando.

Actualmente, es posible alcanzar un costo nivelado de H2 a partir del reformado de gas natural con captura y almacenamiento de CO2 de 1,4 / 1,8 USD/kg, considerando precios de GN entre 3-5 USD/MMBTU respectivamente; mientras que se espera que el hidrógeno limpio producido por electrólisis renovable del agua pueda estar entre 1,5-1,6 USD/kg en 2030.

En un análisis de emisiones, el hidrógeno limpio producido a partir de reformado de gas natural con 90% de captura y almacenamiento de carbono, tiene el potencial de reducir el 66% de emisiones equivalente de CO2. En el caso del H2 a partir de electrólisis renovable del agua, la reducción en emisiones de CO2 equivalente es de 100%.

Los costos proyectados pueden acelerar la adopción de tecnologías de hidrógeno y su masificación, sobre todo para la industria y la movilidad. Los escenarios más optimistas muestran que la industria tendrá oportunidades para el hidrógeno limpio en la segunda mitad de esta década, principalmente en los sectores de amoníaco, metanol, refino y acero.

En relación con la movilidad, un escenario optimista visualiza que, también para la segunda mitad de la década, los trenes regionales y camiones de alto tonelaje a hidrógeno podrían alcanzar la paridad de costos con las tecnologías actuales de combustión interna de otros combustibles. Se espera la creación de un mercado diferencial de moléculas limpias, en donde el interés de los compradores estará dado por la relación precio-poder de descarbonización.

En este sentido, el hidrógeno producido por reformado de gas natural con captura de emisiones aparece como una oportunidad para posicionar al país como exportador de moléculas limpias en forma temprana, mientras que se desarrolla la cadena del hidrógeno producido por electrólisis utilizando renovables.

Fuente: InfoCielo