Los analistas Elena Nadtotchi y Steven Wood dicen que la calidad crediticia de las empresas del sector continuará mejorando en 2022, luego de una recuperación en 2021 del deterioro significativo observado en el primer año de la pandemia.
“Si los precios del petróleo se mantienen en lo más alto de nuestra estimación, las grandes empresas generarán un flujo de caja operativo aún mayor que cuando el petróleo superó los 100 dólares el barril en 2014”, dicen. Moody's cree que la mayor parte de este flujo de efectivo se dirigirá a los accionistas, ya que las estrategias de inversión de las empresas siguen siendo disciplinadas y muchas de ellas ya no necesitan reducir la deuda. Otro punto sobre el que llama la atención la agencia es que la demanda de combustible seguirá siendo alta incluso con el movimiento de descarbonización acelerado en todo el mundo.
Se espera que la demanda de gasolina, por ejemplo, supere los niveles previos a la pandemia, incluso con el aumento de las ventas de vehículos eléctricos. “El aumento de las emisiones de carbono correspondientes presionará a los accionistas para que las empresas aceleren la transición energética de sus negocios e inspiren leyes para reducir la demanda de petróleo y gas”, explican los analistas.
También se espera que la consolidación en el segmento de exploración y producción continúe en 2022, dice Moody's, ya que las grandes empresas del sector optimizan sus activos y se posicionan para el choque de precios y la transición energética del futuro. Un fuerte flujo de caja impulsará las adquisiciones.
Fuente: O Globo