Demora. El programa nacional de reactivación del empleo (PNRE) aprobado por Decreto Supremo N.º 4272, hasta hoy no arranca.
EL DÍA

El sobregiro de Bs18.039 millones que, el anterior Gobierno de Evo Morales, heredó como un gran hueco financiero en el Tesoro General de la Nación (TGN), es considerado por el economista Germán Molina, como una de las trabas que haría inviable la puesta en marcha del Programa Nacional de Reactivación del Empleo (PNRE). El plan aprobado, el pasado 23 de junio, por Decreto Supremo N.º 4272, luego de 21 días, no tiene siquiera las normativas reglamentarias para poner en marcha su ejecución.

Para reactivar la economía no hay otra manera que inyectar capital. Y en circunstancias donde la pandemia del coronovirus ha provocado un shock en la oferta y la demanda, solo el Estado, a través del TGN, puede implementar mecanismos de salvataje a las empresas para preservar el empleo y en el mejor de los casos reactivar el empleo. En ese contexto, Molina señala que, si bien el PNRE del Gobierno anticipó una inyección de Bs30.000 millones, dicha previsión se verá mermada con el hueco financiero como efecto del sobregiro de Bs18.000 millones. Además, menciona que hay una deuda flotante (gasto público ejecutado y no pagado al sector privado del sector construcción) de Bs2.000 millones.

“Ambas obligaciones hacen alrededor de Bs20.000 millones, que si deciden honrar el total de estas obligaciones sólo contarían con un saldo neto de Bs10.000 millones, para destinar a la reactivación económica”, argumenta el economista.

Lea la noticia