El Gobierno mantuvo un encuentro con los privados y por primera vez aceptó el uso de transgénicos para los biocombustibles. Desde Anapo y Cappo indicaron que el país se beneficia. Para Probioma, la decisión es errada y apresurada.
EL DEBER

Inédito. Por primera vez el Gobierno dejó de lado su postura en contra de los transgénicosy aceptó que para llevar adelante el proyecto de biodiésel es necesario aceptar el uso de dos semillas de soya (Intacta y HB4), que provienen de un tratamiento biotecnológico. El principio de acuerdo se generó en la reunión que se desarrolló en el hangar presidencial de Viru Viru en la que participó Evo Morales, jefe de Estado, Álvaro García Linera, vicepresidente, los ministros del área económica y los principales representantes del sector privado.

Lea la noticia>