"La empresa decía que aprovechaba todas las partes de la vaca menos el mugido", dijo Diana Cerilla, al tiempo que me guiaba al corazón de lo que llama la "sala para matar".

Mural en Frigorífico Anglo
BBC Mundo

En la década de 1930, hasta 1.600 vacas por día (además de miles de ovejas, cerdos, gallinas y otros animales) conocían su final en el matadero antes de ser procesados, empaquetados y exportados a distintas partes del mundo. Le eché una mirada a la espeluznante formación de ganchos, poleas, ruedas, cadenas, cintas de transporte y balanzas, inmóviles pero ominosas, y empecé a temblar.

Lea la noticia>