FUENTE: ECONOMY
El volumen de carga que pasó por Puerto Aguirre, Puerto Jennefer y Gravetal durante el 2017 alcanzó a 1,6 millones de toneladas (tn) que ponderados con el total de la carga del comercio exterior de 5,1 millones, se puede afirmar que poco más del 30% del volumen sale e ingresa por el sudeste boliviano. El crecimiento es considerable, tomando en cuenta que hace cinco años solo pasaba por la hidrovía Paraguay-Paraná menos de un millón de toneladas de carga, así lo señala el Instituto Boliviano de Comercio Exterior (IBCE).
Gary Rodríguez, gerente del IBCE, explicó que la carga que sale e ingresa por la hidrovía está conformada principalmente por torta y aceite de soya, además clinker, hierro, cemento, diésel y gasolina, a pesar de que aún no operan en su total capacidad, por lo que considera que se debería promocionar e incentivar su uso. Por ello, indica que el gobierno debería apoyar con una declaratoria de zona primaria aduanera, es decir que el Estado tenga presencia en el lugar.
Otra muestra clara de apoyo también sería que los productos e insumos que se importan a través de los puertos chilenos para las empresas públicas se hagan por la hidrovía. “Esas serían unas señales potentes para nuestros operadores del comercio exterior y para las iniciativas ya consolidadas”, dijo Rodríguez.
En el caso de Puerto Busch, afirma que a pesar que existe un pequeño muelle, una cinta transportadora y ya se ha exportado un pequeño volumen de mineral de hierro, aún falta mucho para hacer de este lugar un puerto multipropósito, para ello consideran que se deben invertir entre $us 600 a 800 millones en un esfuerzo público-privado. En ese sentido, Rodríguez explica que Puerto Busch tiene todas las condiciones para ser la alternativa boliviana sobre aguas internacionales del río Paraguay y con navegabilidad los 365 días del año, pero falta trabajar en el acceso carretero y ferroviario. Afirmó que toda la infraestructura podría demorar entre tres a cinco años en construirse, por lo que urge agilizar todo el proceso.
Oswaldo Barriga, presidente de la Cadex, manifestó que Bolivia debe apuntar a convertirse en la bisagra del comercio internacional de la región por su estratégica ubicación. Por ello considera que se debe impulsar todas las alternativas que tiene el país, además de los puertos de Chile y Perú, es decir los puertos de la hidrovía Paraguay-Paraná, además de Puerto Bush y por el lado de la amazonía por Puerto Villarroel, aunque dependerá de un puerto brasileño.
“El revés que tuvo Bolivia en la Haya tiene que convertirse en oportunidad. Puerto Busch es el único puerto que está sobre aguas internacionales, sobre el río Paraguay. Tenemos que convertirnos en la bisagra para los productos, Bolivia tiene que ser ese espacio de integración de los mercados de la Comunidad Andina, del Mercosur y de nuestro país por su puesto”, dijo Barriga. José Luis Parada, asesor económico de la Gobernación cruceña, afirmó que se debe buscar otras alternativas reales para el comercio exterior. En ese sentido dio su visto bueno a las la oferta del gobierno italiano de un crédito de $us 600 millones, además hacer realidad el tren Bioceánico y el hub Viru Viru, ve que se estaría entrando a una nueva etapa para la producción y comercialización de productos.
El volumen de carga que pasó por Puerto Aguirre, Puerto Jennefer y Gravetal durante el 2017 alcanzó a 1,6 millones de toneladas (tn) que ponderados con el total de la carga del comercio exterior de 5,1 millones, se puede afirmar que poco más del 30% del volumen sale e ingresa por el sudeste boliviano. El crecimiento es considerable, tomando en cuenta que hace cinco años solo pasaba por la hidrovía Paraguay-Paraná menos de un millón de toneladas de carga, así lo señala el Instituto Boliviano de Comercio Exterior (IBCE).
Gary Rodríguez, gerente del IBCE, explicó que la carga que sale e ingresa por la hidrovía está conformada principalmente por torta y aceite de soya, además clinker, hierro, cemento, diésel y gasolina, a pesar de que aún no operan en su total capacidad, por lo que considera que se debería promocionar e incentivar su uso. Por ello, indica que el gobierno debería apoyar con una declaratoria de zona primaria aduanera, es decir que el Estado tenga presencia en el lugar.
Otra muestra clara de apoyo también sería que los productos e insumos que se importan a través de los puertos chilenos para las empresas públicas se hagan por la hidrovía. “Esas serían unas señales potentes para nuestros operadores del comercio exterior y para las iniciativas ya consolidadas”, dijo Rodríguez.
En el caso de Puerto Busch, afirma que a pesar que existe un pequeño muelle, una cinta transportadora y ya se ha exportado un pequeño volumen de mineral de hierro, aún falta mucho para hacer de este lugar un puerto multipropósito, para ello consideran que se deben invertir entre $us 600 a 800 millones en un esfuerzo público-privado. En ese sentido, Rodríguez explica que Puerto Busch tiene todas las condiciones para ser la alternativa boliviana sobre aguas internacionales del río Paraguay y con navegabilidad los 365 días del año, pero falta trabajar en el acceso carretero y ferroviario. Afirmó que toda la infraestructura podría demorar entre tres a cinco años en construirse, por lo que urge agilizar todo el proceso.
Oswaldo Barriga, presidente de la Cadex, manifestó que Bolivia debe apuntar a convertirse en la bisagra del comercio internacional de la región por su estratégica ubicación. Por ello considera que se debe impulsar todas las alternativas que tiene el país, además de los puertos de Chile y Perú, es decir los puertos de la hidrovía Paraguay-Paraná, además de Puerto Bush y por el lado de la amazonía por Puerto Villarroel, aunque dependerá de un puerto brasileño.
“El revés que tuvo Bolivia en la Haya tiene que convertirse en oportunidad. Puerto Busch es el único puerto que está sobre aguas internacionales, sobre el río Paraguay. Tenemos que convertirnos en la bisagra para los productos, Bolivia tiene que ser ese espacio de integración de los mercados de la Comunidad Andina, del Mercosur y de nuestro país por su puesto”, dijo Barriga. José Luis Parada, asesor económico de la Gobernación cruceña, afirmó que se debe buscar otras alternativas reales para el comercio exterior. En ese sentido dio su visto bueno a las la oferta del gobierno italiano de un crédito de $us 600 millones, además hacer realidad el tren Bioceánico y el hub Viru Viru, ve que se estaría entrando a una nueva etapa para la producción y comercialización de productos.