Para los empresarios, la demanda interna debe generar a mediano y largo plazo una oferta importante, es decir, crear nuevas industrias.
Página Siete /La Paz
 
 
La Cámara Nacional de Comercio (CNC) advirtió ayer que el modelo económico que aplica el Gobierno, basado en la demanda interna, se estancó y que hay que fortalecerlo.
 
 
“Para  2017, las expectativas de fin de año son un crecimiento menor al 4%, por ello se puede hablar de un estancamiento de este modelo económico basado en la demanda interna”, evaluó ayer el presidente de la CNC, Marco Antonio Salinas.
 
 
Para el empresario, la demanda interna debe generar, a mediano y largo plazo, una oferta importante, es decir crear  nuevas industrias tanto privadas como estatales, cambiar la matriz productiva.
 
 
“No es un modelo acabado en ningún caso, pero es un modelo que ha tenido éxito pero que tiene que tener una visión, a mediano y a largo plazo, y que genere oferta”, consideró Salinas.
 
 
Según la evaluación de la CNC la economía este año cerrará con un crecimiento de 4%, inferior a  los elevados índices de  2013 cuando se registró 6,8% o   5,5% en 2014. Desde ese año, se observa una desaceleración  en 2015; la expansión fue de  4,9% y en 2016, se redujo a 4,3%.
 
 
Otro tema que observa la entidad  es el  déficit comercial que se registró entre enero y septiembre pasado con 899 millones de dólares, el mayor saldo comercial negativo registrado por Bolivia desde el año 2000.
 
 
Pese a un leve repunte en el valor de las exportaciones de hidrocarburos y minerales durante este año, el deterioro de la balanza comercial se acentuó, añadió.
 
 
Salinas sostuvo que  es necesario diversificar la economía y cambiar la matriz productiva con el fin de no depender de las exportaciones tradicionales (materias primas).
 
 
También preocupa, dijo, el  déficit fiscal que  en 2016 alcanzó el  6,6% del PIB y  este año se prevé un 7% y para 2018 un 8,3%.
 
 
Añadió que esta brecha  será financiada con las Reservas Internacionales Netas, deuda externa y emisión de bonos.
 
 
 Según Salinas es “imperativo” reducir el gasto público para minimizar los efectos adversos por los déficit externos y reorientar la asignación de recursos públicos para priorizar políticas de salud, educación, mejora de la productividad laboral.
 
 
También se  debe reducir el déficit fiscal, la deuda externa, la informalidad, el contrabando y la corrupción en el sector público.
 
 
 “Se decía que la economía va bien, pero el país va mal, pero se percibe que ambos se están deteriorando. Por ello, es necesario pensar sobre cuáles son los riesgos y oportunidades que se le presentan al país al finalizar el año”, remarcó  el titular de los empresarios del comercio.