Fuente: La Prensa Austral
En paralelo, se conocieron los esfuerzos de la estatal por incrementar la inversión de prospección y producción, sobre todo explorando la búsqueda de shale y tight gas en la zona. Esto llevó al anuncio de que Enap cuenta con reservas suficientes para asegurar el abastecimiento gasífero de la región por los próximos veinte años.
No obstante, el envío del proyecto de la Ley de Presupuesto 2018 al Congreso, develó que caerán en un 12,3% los recursos destinados por el Estado a Enap para subvencionar el precio de venta de gas natural. Así, de los $66 mil 701 millones otorgados este año, se acortará a $58 mil 521 millones.
Estos antecedentes encendieron una alerta a nivel ciudadano, si bien representantes del gobierno regional salieron prontamente a asegurar que el recorte de poco más de $8 mil millones no implicará una alteración de las tarifas del gas en la zona.
La explicación dada es que se reduce el monto del subsidio por factores tan simples y entendibles como el favorable tipo de cambio y la mayor eficiencia productiva de Enap.
Estas tendencias ya habrían tenido como impacto que este año se han gastado sólo $42 mil millones en subsidio, una cantidad bastante inferior al monto total asignado para este concepto.
También resulta alentador saber que se está estudiando en las respectivas comisiones parlamentarias una compensación entre el precio de producción que no será determinado por Enap, sino por la Comisión Nacional de Energía y el precio de venta de la compañía distribuidora, a fin de que, sí o sí, no se registre un alza que vaya más allá del convenido reajuste por el IPC.