El Banco Mundial informó ayer que las remesas a países de ingreso bajo y mediano se encuentran en vías de recuperación en este 2017, luego de dos años consecutivos de disminución.
FUENTE: PÁGINA SIETE

Estima que las remesas a los países en desarrollo registradas oficialmente crecerán un 4,8% y alcanzarán los 450 mil millones de dólares durante este año. Según el organismo internacional, se prevé que las remesas mundiales, que incluyen los flujos destinados a países de ingreso alto, experimentarán un crecimiento del 3,9% y ascenderán a 596 mil millones de dólares. La recuperación de los flujos de remesas está impulsada por un crecimiento relativamente más sólido de la Unión Europea, la Federación de Rusia y Estados Unidos.

Por lo tanto, es probable que las regiones que muestren el mayor crecimiento de los flujos de remesas este año sean África al sur del Sahara, Europa y Asia central y América Latina y el Caribe, anticipa el documento oficial. Mientras que en los países del Consejo de Cooperación del Golfo (CCG), el ajuste fiscal generado por la baja en los precios del petróleo y las políticas que desalientan la contratación de trabajadores extranjeros, harán reducir los flujos de remesas a Asia oriental y meridional.

De los principales receptores de remesas, India conserva el primer puesto, con flujos previstos por un total de 65.000 millones de dólares este año; seguida de China (con $us 61 .000 millones) y México (con $us 31.000 millones). Con la recuperación de la economía mundial, se prevé que las remesas a países de ingreso bajo y mediano registrarán un crecimiento moderado del 3,5% en 2018 y ascenderán a 466 mil millones de dólares. Asimismo, se espera un aumento del 6,9% de las remesas dirigidas a América Latina y el Caribe, que alcanzarán los 79.000 millones de dólares en 2017. El crecimiento económico y la recuperación del mercado laboral de Estados Unidos están teniendo un impacto positivo sobre México.