Ante la decisión del Gobierno Nacional de utilizar las aguas del río Pilcomayo para el funcionamiento del complejo petroquímico en Yacuiba, los indígenas de la región Autónoma del Chaco y las instituciones cívicas advierten que el uso de agua del Pilcomayo y el Aguaragüe traerá serias consecuencias agrícolas y medio ambientales a esa región.

EL PAIS / TARIJA
 
JESÚS R. CARDOZO

El presidente del Consejo de Capitanes Guaraníes de Tarija (CCGT), Tomas Araray, manifestó que ante esta situación se  está convocando a una asamblea para la próxima semana a todos los pueblos originarios del Chaco, para debatir el tema y exigir una explicación a las autoridades de Gobierno sobre el uso de las aguas del Pilcomayo para la Petroquímica.

Según el dirigente guaraní, la ejecución del proyecto en el municipio de Yacuiba, si bien generará importantes ingresos a la región, también temen que deje sin agua a miles de familias indígenas y  campesinas que viven de la pesca, ganadería y agricultura a  las riberas del río Pilcomayo.

En ese sentido, el dirigente manifestó que conformarán la primera Confederación de los Pueblos del Sur, para defender y preservar la cuenca del río y trabajar más de cerca con el Gobierno en la ejecución del proyecto, con la finalidad de evitar  un desastre natural y una contaminación medio ambiental.

Para el director de Hidrocarburos del Comité Cívico Departamental, Daniel Centeno, en el departamento de Tarija no existe una sola fuente de agua que pueda solventar con el líquido elemento al complejo petroquímico, por lo que instó a las autoridades de la región del Chaco y el Gobierno a resolver el tema antes de iniciar la ejecución del proyecto.

Por otra parte aseguró que la ejecución del proyecto en Yacuiba va a generar serios problemas medio ambientales y de problemas de agua al Chaco Tarijeño, pese a que el año 2014 el Comité Cívico dirigido en ese entonces por Waldemar Peralta, junto a otras instituciones, demandó al Gobierno que el proyecto se ejecute en Yacuiba.

Cabe recordar que el presidente Evo Morales lanzó en los primeros días del mes de mayo de esta gestión  la licitación pública internacional para adjudicar la construcción en Yacuiba de una planta petroquímica con una inversión de más de 2.200 millones de dólares y se espera que en 2021 inicie operaciones.

Según fuentes oficiales, la Planta Petroquímica de Propileno-Polipropileno procesará más de 906.000 toneladas por día de propano y eso permitirá una producción de 250.000 toneladas de polímeros al año lo que significará nuevos ingresos para la economía boliviana.

Asimismo se calcula que Bolivia podrá obtener ingresos anuales por $us 420 millones, por la comercialización de polímeros y va generar  más 4.000 empleos directos. En la planta, según autoridades del Ministerio de Hidrocarburos, se contratará a personal boliviano no solo de Tarija, sino también de otras regiones.