En la propuesta presentada por el congresista Miguel Román Valdivia se señala como objetivo impulsar el uso de estos vehículos, por ser más amigables con el medioambiente que los autos tradicionales y contribuir a la reducción de emisiones de gases de efecto invernadero.
Fuente: Gestión
  
Un proyecto de ley de la bancada Acción Popular se dirige a abordar uno de los principales obstáculos para el uso de vehículos eléctricos e híbridos (con motor y batería) en el país: la falta de estaciones de carga para las baterías de estos vehículos (electrolineras).
 
La ausencia de estas instalaciones desalienta la adquisición de vehículos que funcionan a batería y, a su vez, la escasa cantidad de este tipo de autos hace difícil que empresarios inviertan en electrolineras. A la fecha, solo es factible recargar, desde fuentes de electricidad caseras, la batería de autos eléctricos o híbridos de pequeño tamaño.
 
En la propuesta presentada por el congresista Miguel Román Valdivia se señala como objetivo impulsar el uso de estos vehículos, por ser más amigables con el medioambiente que los autos tradicionales y contribuir a la reducción de emisiones de gases de efecto invernadero.
 
Centros de carga
 
Así, los gobiernos regionales y locales deberán promover iniciativas privadas para la construcción de centros de carga para vehículos eléctricos, en coordinación con los ministerios de Transportes y Comunicaciones, Energía y Minas, y del Ambiente. Sin embargo, no se precisa de qué manera lo harán.
 
También plantea establecer el servicio de cargadores de electricidad para estos vehículos en las áreas comunes de cada condominio de uso residencial o comercial que se construya.
 
Beneficios para compradores
 
Además, plantea otorgar incentivos financieros, en forma de bonos o medidas tributarias, y no financieros, para fomentar la adquisición de vehículos eléctricos. Estos incentivos los establecería una comisión integrada por representantes de la Presidencia del Consejo de Ministros (PCM), y los ministerios de Economía, Transportes, Ambientes y Energía y Minas, además del Instituto Nacional de Calidad (Inacal).
 
Actualmente, la compra de vehículos eléctricos e híbridos está exenta del Impuesto Selectivo al Consumo (ISC), pero gravada con el Impuesto General a las Ventas (IGV) y el Impuesto al Patrimonio Vehicular, por lo que los beneficios tributarios tendrían que estar relacionados con estos dos últimos, señaló el gerente técnico normativo de la Asociación Automotriz del Perú (AAP), Ellioth Tarazona.
 
En su opinión, la implementación de esta propuesta será importante para avanzar hacia la electromovilidad. De aprobarse, la instalación de las primeras electrolineras tardaría entre dos y tres años.
 
No obstante, observó que la propuesta debería especificar que los incentivos se concedan tanto para la adquisición de vehículos eléctricos como híbridos, puesto que el uso de estos últimos constituirá el primer paso hacia la electromovilidad.
 
“Para promover el uso será necesario otorgar incentivos tanto a los inversionistas que busquen instalar electrolineras como a los usuarios de los vehículos. Para el desarrollo de electrolineras será necesario que se establezcan asociaciones público-privadas. Las primeras electrolineras son las que van a necesitar más apoyo”, comentó Tarazona.