Editorial

Opinión de la presidente de la CBHE, Claudia Cronenbold en la edición 120 de la revista Petroleo&Gas

En un periodo referido por el Consejo Mundial de Energía como de la Gran Transición Energética, los líderes de la energía deben prestar atención a muchas señales de cambio diferentes y distinguir los problemas clave del ruido.

Como no ocurría desde la irrupción de los hidrocarburos como fuente de energía y combustión, hoy transcurrimos una era de cambios por la irrupción de nuevas fuentes de energía sobre todo renovables, en particular la eólica y la solar que han comenzado a pintar una tendencia creciente a su favor.

La primera creció en su capacidad instalada de menos 20 Gigavatios en 2001 a cerca de 600 GW el último año, cuando creció un 9.6%. Entre tanto la solar ha llegado a los 100 GW.

La Agencia Internacional de Energía (IEA) considera que las energías renovables tendrán un crecimiento de 1.000 GW para el año 2022, lo que se equipara a la mitad de la capacidad en el mundo de la energía en base a carbón, la cual tardó 80 años en finalizar su construcción

Asimismo, la IEA cree que estamos viendo “el nacimiento de una nueva era en la energía solar fotovoltaica”.

En el lado de los combustibles fósiles, tanto el carbón como el petróleo tienden a eclipsar su presencia en las próximas décadas, siendo el gas natural el único fósil que crecerá en demanda y capacidad productiva. Esto por sus virtudes menos contaminantes, amplio uso cada vez más fácil transporte y precio.

Este escenario es denominado como de la triple transición energética, la cual es argumentada por un proceso de des carbonización de la economía, es decir un sistema productivo cada vez más ´verde´ y eficiente, por un rediseño del mercado ante estos grandes cambios y, por otro lado, la resiliencia energética, entendida la capacidad de recuperación del sistema energético ante amenazas como los ataques cibernéticos y los eventos climáticos cada vez más extremos.

En ese marco, se realiza la décima versión del World Energy Issues Monitor 2019 (Monitor Mundial de temas energéticos), una encuesta del Consejo Mundial de Energía realizada a 2.300 líderes globales de 86 países, quienes son consultados sobre cinco áreas: riesgos macroeconómicos, geopolítica, entorno empresarial, visión energética y tecnología.

El monitor de temas energéticos identifica los patrones cambiantes de los problemas conectados que están dando forma a las transiciones de energía de nuestros días y plantea las preocupaciones, los impactos y las acciones que se están haciendo a escala global.

En el informe, se aprecia por ejemplo que a escala mundial, los líderes ven incertidumbres críticas relacionadas a la digitalización, al almacenamiento eléctrico, a los precios de las materias primas, a los nuevos diseños de mercado y al crecimiento económico.

Por su lado, en Latinoamérica, además de esos tópicos, los líderes regionales ven como crítico el tema de la corrupción, el precio de la electricidad y las políticas de los Estados Unidos.

Es por eso que en esta edición de Petroleo&Gas presentamos una síntesis del informe consolidado y el acceso para conocerlo en detalle en sus 211 páginas en el sitio web del Consejo Mundial de Energía.

El mundo de la energía está en una nueva ola y conocer lo que piensan los líderes mundiales en energía es un termómetro que bien vale la pena mirar.