Los miembros de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) incumplieron en junio el acuerdo que habían establecido para limitar la producción de crudo a un nivel que no se había constatado en los seis meses que lleva en vigor, advirtió la Agencia Internacional de la Energía (AIE).
Fuente: El Nacional
   
En su informe mensual sobre el mercado petrolero, la AIE señaló que su grado de cumplimiento fue de 78%, frente a 95% en mayo, e hizo notar que incluso los otros países que no son miembros del cártel, pero que participan en ese compromiso, (como Rusia) lo respetaron en un porcentaje superior (82%).
 
Los catorce miembros de la OPEP y diez de sus competidores, entre ellos Rusia, acordaron en noviembre pasado un recorte de 1.8 millones de barriles diarios, vigente desde enero, y que debe prolongarse en principio hasta marzo de 2018, para tratar de poner fin a la caída de precios del barril.
 
La AIE, que constató que desde comienzos de junio el barril ha estado por debajo de los 50 dólares (netamente por debajo de ese listón en los últimos días), señaló que cada mes aparecen nuevos obstáculos al esperado reequilibrio del mercado.
 
En junio fueron dos principales: el elevado incumplimiento del compromiso de reducción de la producción y el fuerte incremento de las extracciones de Libia y Nigeria (que aunque pertenecen a la OPEP, están eximidos de atenerse a los recortes), en más de 700.000 barriles diarios respecto al mes anterior.
 
Al final, dos tercios del esfuerzo de disminución realizado por el cártel se evaporó por las aportaciones de Libia y Nigeria y su producción global aumentó en junio en 340.000 barriles diarios hasta 32.6 millones, el nivel más elevado en 2017.
 
Por si fuera poco, los que no pertenecen a la OPEP sacaron al mercado 380.000 barriles diarios suplementarios y la agencia calcula que en el conjunto del año el incremento será de 700.000 barriles diarios, y de 1,4 millones en 2018.
 
A todo eso vuelven a contribuir de forma particular los yacimientos de esquistos de Estados Unidos, donde la actividad acumula ya 33 semanas consecutivas de aumento, lo que evidencia su gran resistencia a los bajos precios del barril.
 
Por el lado de la demanda, la AIE revisó ligeramente al alza sus expectativas, sobre todo a la vista del repunte del segundo trimestre, con 1,5 millones de barriles más que en el mismo periodo de 2016.
 
La agencia espera ahora que el alza del consumo para todo el ejercicio 2017 será de 1.4 millones de barriles más (hasta 98 millones de barriles al día), es decir, 100.000 más de lo que había anticipado el mes pasado.