Los sectores productivos y que generan empleo no han sido priorizados por estos recursos. La mayor parte del IDH es asignada a la Renta Dignidad, gastos corrientes y otros del nivel central, educación y transporte.
LOS TIEMPOS

El 66 por ciento de los ingresos de instancias estatales por concepto del Impuesto Directo a los Hidrocarburos (IDH) fueron destinados a gastos corrientes, y sólo el 34 por ciento sirvieron para inversiones.
 
El cálculo fue realizado por la Fundación Jubileo, que hizo este estudio del período 2011-2017 y lo presentó en el documento “Más Gasto que Inversión”.
 
Además, al analizar el destino del IDH en detalle y por sector, se observa una dispersión en el uso de estos recursos hacia un gran número de finalidades, lo que refleja que los niveles de gobierno han atendido, con estos recursos, diferentes necesidades y demandas, más allá de un plan estratégico o proyecto conjunto.
 
Los sectores productivos y que generan empleo no han sido priorizados por estos recursos. La mayor parte del IDH es asignada a la Renta Dignidad, gastos corrientes y otros del nivel central, educación y transporte.
 
Los recursos asignados hacia sectores como el agropecuario, desarrollo económico/productivo y turismo sólo llegan al 3 por ciento de los gastos en promedio, explica Jubileo.
 
Según el documento, el Estado recibió más de 15.000 millones de dólares por IDH entre 2005 y 2017, lo que representa más de 20 por ciento de los ingresos tributarios.
 
Los principales beneficiarios del IDH fueron: municipios con 33 por ciento; Renta Dignidad, 22 por ciento; Tesoro General de la Nación (Nivel Central), 20 por ciento; gobernaciones, 13 por ciento, y universidades, 7 por ciento
 
Para la Fundación Jubileo, el hecho de que las entidades beneficiarias del IDH usen la mayoría de estos recursos en gasto corriente “genera riesgo de insostenibilidad e implica una pérdida de patrimonio”.
 
“Es momento de evaluar si es posible concertar e implementar cambios para un futuro mejor o, de lo contrario, se repetirán los errores del pasado, dejando que transcurra un ciclo económico favorable para quedar nuevamente en la pobreza”, sentencia la nota de prensa de Jubileo, tras la exposición de los datos.
 
 
 
ANTECEDENTES
 
La Ley de Hidrocarburos Nº 3058 de 17 de mayo de 2005 creó el Impuesto Directo a los Hidrocarburos (IDH), con una alícuota de 32 por ciento del valor de la producción.
 
Con la creación de IDH y los mejores precios internacionales de hidrocarburos (hasta 2014), el sector público, en sus diferentes niveles, y el país en su conjunto, cuentan con muchos más recursos que en el pasado.
 
Más de 15 mil millones de dólares recibió el Estado por IDH entre 2005 y 2017.