En el Biobío hay, hasta el momento, 18 proyectos en etapa de calificación ambiental, que de ser aprobados requerirán mano de obra para ejecución y operación.
Fuente: El Sur
   
Si hay un sector que está liderando las inversiones en el país es el energético, sobre todo con las energías renovables no convencionales (Ernc), lo que quedó de manifiesto en la última licitación, lo que obliga que a contar desde el 2022 con generadores con este tipo de sistema.
 
Para ello, es necesario que los proyectos deban comenzar su ejecución a más tardar dentro de dos años o antes, pues muchos de ellos toman 12 o más meses en levantarse.
 
Además del impacto positivo que trae todo esto, está la necesidad de contar con recursos humanos especializados, principalmente, pues la mayoría de las iniciativas están enfocadas en nuevas centrales eólicas, solares, geotérmicas e hidráulicas, algunas de las cuales, sobre todo las primeras, ya están operando en la provincia de Biobío.
 
En la Región hay 18 proyectos en etapa de calificación ambiental, los cuales, solo en inversión, superan los US$2.172 millones.
 
En cuanto a mano de obra en construcción requerirán entre todos 3.732 personas y en la fase de operación 385. Incluso, en ambos ítem podrían ser más, ya que algunas iniciativas aún no informar el número que requerirán.
 
OPORTUNIDADES
 
Para la consultora ambiental SGA, “se generará un incremento de la demanda, principalmente de servicios profesionales, la que debería empezar a verse reflejada a partir del próximo año. Sin perjuicio de todas las acciones relacionadas, como por ejemplo importaciones de partes y piezas, que también generan indirectamente trabajo”.
 
Carolina Varela, jefa de Servicio y Selección de Adecco Chile, el energético es un sector que en un corto plazo será muy atractivo en términos de generación de empleos.
 
Estima que la positiva evaluación de diferentes actores de la industria sobre la reciente licitación eléctrica chilena, da a entender que en los próximos años será un rubro que entregará diversas oportunidades de empleo para profesionales, operativos y técnicos. Esto evidentemente estará determinado por las etapas de la evolución del proyecto.
 
La profesional indicó que indudablemente en proyectos como estos existen diferentes etapas y las demandas de empleo van a depender de las mismas.
 
“El levantamiento de un proyecto energético de esta envergadura va a requerir principalmente profesionales tales como: ingenieros civiles, constructores y eléctricos. También habría cabida para ingenieros ambientales y de recursos naturales, así como para profesionales de áreas sociales, entre otras”, detalló.
 
Adicionalmente, considera que este auge abrirá puertas a cargos operativos y técnicos, a los que también hay que sumar los empleos indirectos, por ejemplo, los relacionados a la importación o exportación de materiales u otros artículos.
 
“Será un sector que moverá diferentes oportunidades de empleo en el futuro, ya que la necesidad de levantar nuevas centrales nos exigirá la contratación de nuevos recursos que asuman diferentes posiciones en las distintas compañías que pretenden iniciar operaciones en Chile”, remarcó.
 
SGA apuntó que en cuanto a los salarios, como en todos los rubros, estos dependen de la especialidad y experiencia del postulante. Sin embargo, para las profesiones que se han indicado, el mercado chileno tiene valores que varían entre los $600 mil y $2 millones mensuales.
 
EXITOSO CFT
 
Jimena Jara, ministra (s) de Energía, sostuvo que al ser el Biobío la capital de la energía, genera efectos positivos en la creación de empleo. “Contar con el Centro de Formación Técnica (CFT) de la Energía de Hualpén, que abrió el año pasado, es un paso importante, porque las carreras están siendo demandas por gente de la zona”, hizo ver.
 
Este año, el recinto educacional, que nació como un proyecto conjunto entre Enap, a través de su programa “Hualpén Suma”, Ceduc UCN, la Intendencia del Biobío y la Municipalidad de Hualpén, experimentó un incremento en las matrículas, tripicándolas.
 
Hasta fines del año pasado, el CFT contaba con 348 alumnos matriculados para las carreras de Electricidad y Eficiencia Energética, Instrumentación y Control Industrial, Prevención de Riesgos, Administración de Empresas, Educación de Párvulos y Computación e Informática. Sus matrículas están abiertas hasta fines de febrero o cuando se completen los cupos.
 
La ministra (s) afirmó que el Biobío cuenta con una característica especial y que requiere especialización profesional, pues cuenta con todas las energías, lo que haría que los profesionales no salgan de las regiones para ejercer.
 
Recordó que el sector que encabeza es que el que más inversiones está generando, por unos US$ 16 mil millones, superando a Minería. “Cuando llegamos al gobierno había muy pocas centrales en construcción y hoy 54 versus 28 que existían en 2014. Entonces, se ha generado inversión, lo que trae competencia, lo cual es positivo porque también bajas los precios”, remarcó la autoridad.
 
DESARROLLO
 
La seremi de Energía, Carola Venegas, declaró que el hecho que “que más personas puedan acceder a estudiar en el CFT de la Energía indica que fue un acierto haberlo creado. Los jóvenes de la Región están viendo en el sector energético una oportunidad para desarrollarse profesionalmente, lo cual es muy positivo ya que el sector en la actualidad es el que lidera la carpeta de inversiones en nuestro país”.
 
Estimó que el desarrollo de un proyecto energético no solo implica la ingeniería, pues hoy en día son necesarias labores de múltiples disciplinas para abarcar todo el ámbito de influencia de estas iniciativas. Es por eso, añadió, que las oportunidades de desarrollo en este ámbito son variadas y no se limitan solo a la etapa de construcción, sino que también durante la operación de las centrales son necesarias personas para tareas complementarias como servicios y mantenciones.